Propiedades del aceite de coco
Las grasas saturadas del aceite de coco son proveedoras de salud.
Único en su composición estructural, el aceite de coco está compuesto por ácidos grasos de cadena media que tienen propiedades antimicrobiales, son fácilmente digeridos por el cuerpo para la obtención de energía y son beneficiosos para el sistema inmunológico. Sus ácidos grasos no tienen efectos negativos sobre el colesterol y ayudan a proteger el corazón.
aumento de energía y vitalidad
El coco es prácticamente el único alimento que contiene ácidos grasos de cadena corta, que al contrario que el resto de las grasas, no necesita enzimas pancreáticas ni bilis para su digestión, por lo que resulta ideal para las personas a las que tienen problemas digestivos o de hígado.
Los ácidos grasos de cadena media abundantes en los cocos se digieren más fácilmente y son utilizados de una manera especial por el cuerpo. Mientras que otras grasas se almacenan en las células de cuerpo, los ácidos grasos de cadena media del aceite de coco se envían directamente al hígado, donde se convierte inmediatamente en energía. Gracias a que esta rápida y fácil absorción se aligera la carga de trabajo del páncreas, el hígado y el sistema digestivo y el aceite de coco “acelera” el sistema metabólico. Todo esto se traduce en un aumento de energía y vitalidad en el cuerpo.
Propiedades antivirales, antibacterianas y antifúngicas
Fuera de la leche materna humana, la más abundante fuente natural de ácido láurico, es el aceite de coco.Un 50% del contenido de grasa en el aceite de coco es una grasa que rara vez se encuentra en la naturaleza llamado ácido láurico, que posee propiedades antivirales, antibacterianas y antifúngicas. El ácido láurico y otros ácidos grasos en el aceite de coco son conocidos por proteger contra la infección por bacterias, virus, levaduras, hongos y parásitos. Sin tener ningún efecto negativo sobre las bacterias intestinales beneficiosas, el aceite de coco inactiva microbios indeseables.
Propiedades benéficas para el sistema cardiovascular
El Aceite de Coco está cargado de grasas saturadas naturales que no afectan el perfil lípido del colesterol en sangre. Estas grasas saturadas elevan el HDL (colesterol bueno) y cambian el LDL (colesterol malo) por un subtipo más benigno, mejoran la coagulación y el estado antioxidante de la sangre. Esto aminora en gran medida los riesgos de contraer enfermedades cardiovasculares a largo plazo.
Cocinar con aceite de coco
El aceite de coco es el único aceite ideal para cocinar debido a su capacidad para soportar mayores temperaturas sin oxidarse ni sufrir modificaciones en sus cualidades. Esto es importante ya que cuando los ácidos grasos comienzan a alterarse pueden liberar radicales libres y se convierten en un tipo de grasas saturadas que ayudan al colesterol a ubicarse en las arterias, incrementando los riesgos de enfermedades cardíacas.
El aceite de coco tiene un sabor y olor muy característico: huele y sabe a coco. Al utilizarlo para freír, no se absorbe y permite preparar comidas más livianas.
Es un aceite que al no contener grasas hidrogenadas, también se puede usar en frío como adherezo para ensaladas, para dar la grasa saludable que el cuerpo necesita.
Seleccionando el tipo correcto de aceite de coco
Los dos tipos principales de aceite de coco que podemos encontrar son el refinado y el extra virgen.
El aceite de coco hidrogenado es un aceite al que se le incluye hidrógeno para quitar los ácidos grasos poli-insaturados, lo que producie grasas trans muy nocivas para la salud. Debemos evitar el consumo de aceite hidrogenado ya que puede desarrollar enfermedades coronarias.
Por otro lado, el Aceite de Coco Virgen, se obtiene mediante presión en frío de la pulpa blanca del coco y se produce sin el uso de productos químicos, por lo que lo hace el aceite de coco ideal para el cosumo.
Potenciales usos y beneficios fuera de la cocina
- Como humectante corporal y facial
- Como desodorante natural
- Como suplemento: toma dos cucharaditas por día para mejorar los hábitos de sueño, ayudar con la agilidad mental y aumentar la producción de leche si estás amamantando.
- Como mascarilla acondicionadora para el cabello
- Como parte de un régimen de belleza: como demaquillante, crema para ojos, crema de noche, exfoliante casero de pies, cuerpo o manos (mezclado con sal o azúcar), humectante labial, bálsamo labial, crema para cutículas o crema para manos.
fuente: www.aceitedecoco.org